Sabih Saylan, gerente de empresas y hombre de confianza del empresario israelí Yosef Maiman, reiteró el viernes 29 que Alejandro Toledo no tuvo ni tiene ninguna relación con los negocios, ni tampoco intervino en las actividades de la empresa costarricense Ecoteva, por intermedio de la cual se financió la compra de inmuebles que hizo la suegra del expresidente, Eva Fernenbug, en Santiago de Surco. 

Empleado de Mayman desde hace 30 años y encargado de generar negocios para este, Saylan asumió la representación legal y actuó como apoderado de Ecoteva en marzo del presente año, en reemplazo de Avraham Avi Dan On, poco después de que se denunciara como supuestamente irregulares, a las adquisiciones y se iniciara un “escándalo mediático” que dura hasta hoy.

Maiman, como lo declaró él mismo hace una semana, temía que las autoridades constarricenses ‘congelaran’ los fondos de la empresa como consecuencia de las denuncias periodísticas, por lo que recurrió al experimentado Saylan para que lo impidiese.

Sin embargo, Saylan aclaró que él no tuvo ninguna participación ni conoce al detalle las operaciones de compra-venta de los inmuebles de Surco, aunque sí recordó que fue la ex primera dama, Eliane Karp de Toledo, quien recomendó a Maiman realizar esas adquisiciones en el año 2011.

El ciudadano israelí recordó también que el interés de Maiman por los negocios inmobiliarios se remonta al año 2006, cuando se inició el auge de la industria de la construcción en el Perú. El interés le fue motivado por amigos peruanos y empresarios que habían incursionado en ese rubro, agregó.

El interés se acrecentó en 2009, después de la crisis económica internacional del año anterior. En ese entonces, Maiman tenía depositados 20 millones de dólares en Scotiabank a nombre de las empresas Milan y Ecotate. Los depósitos estaban en certificados bancarios a plazo fijo, y el empresario decidió incursionar en el campo inmobiliario y así se lo ordenó a Avi Dan On.

Para el efecto, se decidió la creación de Ecoteva. Ante un cuestionamiento del congresista Alejandro Aguinaga (FP), Saylan explicó que es común crear empresas con dos o tres empleados de la propia oficina del abogado encargado. Añadió que son “operaciones transparentes, legales y sencillas”, y están registradas en archivos computarizados de fácil acceso por cualquier interesado. Al respecto, reveló que un abogado costarricense tiene registradas 2,500 empresas con diferentes nombres, lo que también ocurre en otros países centroamericanos, sin que ello llame la atención de nadie.

Saylan respondió a través de una teleconferencia a las preguntas de los congresistas Vicente Zeballos Salinas (SN), presidente de la Comisión de Fiscalización y Contraloría; José León (PP) y Aguinaga Recuenco, como anteriormente lo hicieran Maiman y Avi Dan On.

En otro momento, explicó nuevamente las dudas sobre el origen de los fondos de la empresa, y los préstamos que pidieron desde su formación. Sobre lo primero, explicó que se hizo una transferencia desde la firma panameña.

Respecto a los 5.5 millones destinados a la adquisición de los inmuebles, refirió que una partida de US$ 2.5 millones fue transferida desde una empresa panameña, también propiedad de Maiman, a nombre de Eva Fernenbug, y los restantes US$3 millones fueron ‘prestados’ por la filial de Scotiabank en Costa Rica.

El congresista Aguinaga cuestionó que se prefiriera un préstamo y no se recurriera a los 20 millones que tenía Ecoteva en su cuenta.

Al respecto, Saylan explicó que los fondos de Ecoteva estaban en certificados que estaban por vencer, y no convenía retirarlos porque se perdería los intereses ya generados. Mejor era obtener un préstamo y cancelarlo con los intereses de los certificados, como se hizo finalmente, según explicó.

La misma explicación la dieron anteriormente el empresario Maiman y el exasesor de Toledo, Avi Dan On.

FUENTE: Oficina de Prensa del Congreso de la República